Paula Gómez y su hermano han perdido a sus padres y conviven con Samuel Moreno, su tío político. Él es un buen padre y no tiene la culpa de que ella lo desee, pero Paula se ha cansado de esperar y una noche decide colarse en su habitación. Los dos comenzarán entonces una relación secreta y muy sexual plagada de celos, posesividad y sadomasoquismo que, como el fuego, amenaza con quemarlos a ambos.

Cristina Romero conoció el amor cuando era demasiado joven para comprometerse con él, y ahora se ve a punto de casarse y pensando cada día en un hombre que no es su futuro esposo.

Tras darle muchas vueltas, David Sainz ha escogido la cena de Nochebuena para contarle a su familia que es gay. Entonces, se entera de que su abuela ha invitado a su vecino, por quien él siente una fuerte atracción.

Compartiendo piso con un chico que apenas le habla, Ana Hurtado se ve obligada a permanecer día y noche encerrada con él.

Carmen Millán va a la consulta de un ginecólogo para hacerse una revisión y se encuentra con algo de lo más excitante.

Lidia Hurtado, inspirada por una película cuyo protagonista tiene la actitud que ha anhelado toda su vida, toma una decisión que la lleva a dejar a su novio, demasiado complaciente con ella.

Esta obra forma parte de la serie Lazos. Es autoconclusiva al igual que las demás novelas de la serie, pero se aconseja leerla en segundo lugar.